A glimpse into the creative process of Company E, a Washington, DC-based, internationally focused, contemporary repertory dance company. Written by Company E's Artistic Director, Paul Emerson. Kathryn Pilkington, Co- Artistic Director
Les agradezco a Alice, Jason y Ludovic que se hayan dado el tiempo de concretar estas entrevistas. Es tan importante e interesante, lo que los bailarines tienen que decir sobre el trabajo, sobre todo en procesos como éste, en los cuales se requiere involucrarse en una danza, mas allá de lo físico.
Para mi los bailarines y bailarinas son extraordinarios cuerpos-antenas; que capturan y transmiten, pero además son los puentes que conectan el mundo intangible, onírico, abstracto y poético del creador y lo hacen visible al espectador. En este proceso ellos descifran, codifican y comunican, una y otra vez, hasta lograr hacer cuerpo y danza, las ideas, emociones y abstracciones propuesta por el coreógrafo. Los bailarines, de diferentes maneras, dependiendo de la naturaleza de la propuesta, literalmente nutren, enriquecen y aportan artísticamente su propia humanidad.
Desde la perspectiva de la REVOLUCION DE LAS MARIPOSAS, creo profundamente que la voz y el actuar de cada uno de nosotros, coordinadas y afinadas en una sola dirección, tienen (por muy insignificante que pueda parecernos comparativamente a las voces de los poderes que controlan y gobiernan el mundo), la fuerza de parar el consumo voraz y aniquilador al que estamos sometiendo a este bello mundo que nos cobija y por ende a nosotros mismos.
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Les agradezco a Alice, Jason y Ludovic que se hayan dado el tiempo de concretar estas entrevistas.
Es tan importante e interesante, lo que los bailarines tienen que decir sobre el trabajo, sobre todo en procesos como éste, en los cuales se requiere involucrarse en una danza, mas allá de lo físico.
Para mi los bailarines y bailarinas son extraordinarios cuerpos-antenas; que capturan y transmiten, pero además son los puentes que conectan el mundo intangible, onírico, abstracto y poético del creador y lo hacen visible al espectador. En este proceso ellos descifran, codifican y comunican, una y otra vez, hasta lograr hacer cuerpo y danza, las ideas, emociones y abstracciones propuesta por el coreógrafo.
Los bailarines, de diferentes maneras, dependiendo de la naturaleza de la propuesta, literalmente nutren, enriquecen y aportan artísticamente su propia humanidad.
Desde la perspectiva de la REVOLUCION DE LAS MARIPOSAS, creo profundamente que la voz y el actuar de cada uno de nosotros, coordinadas y afinadas en una sola dirección, tienen (por muy insignificante que pueda parecernos comparativamente a las voces de los poderes que controlan y gobiernan el mundo), la fuerza de parar el consumo voraz y aniquilador al que estamos sometiendo a este bello mundo que nos cobija y por ende a nosotros mismos.
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